7 días, 7 días para esta España nuestra

En la Casa Museo “Anita Guerrero”, sita en la Plaza de la Constitución de Roquetas de Mar se presentó, el pasado viernes, día 13 de julio, a las 19:00 horas, el último libro escrito con pluma académica afilada por el diplomático almeriense Inocencio F. Arias con el título “Esta España Nuestra”, Mentiras, la nueva Guerra Fría y el tahúr de Moncloa, el cual estuvo presentado por el periodista Antonio Lao y la presencia del Alcalde de la ciudad Gabriel Amat, al que acompañaron miembros del equipo de gobierno y la corporación municipal.
El escritor almeriense Inocencio Arias contestó a las preguntas formuladas con acierto didáctico por el director del Diario de Almería, Antonio Lao, todas ellas desde una praxis geopolítica de elevada objetividad profesional y personal, que reflejaron en sus intervenciones un análisis y valoración inteligente de la situación institucional a nivel gubernamental nacional, considerando que “la mentira es ya una seña de identidad” de esta España gobernada por Pedro Sánchez y seis ministros comunistas.
Reflexionó con ese diálogo propio de los años que da la experiencia de la vida y el servicio público al prójimo los grandes desatinos normativos aprobados por reales decretos legislativos con la aquiescencia de los independentistas, que desean romper la unidad de España y aquellos otros que son los herederos de la violencia etarra, que dejó en el camino a miles de víctimas, fallecidos, heridos y un éxodo de ciudadanos con el único objetivo de quebrar ignominiosamente al Estado de derecho consignado en la Constitución de 1978.
Y a las preguntas formuladas al diplomático Inocencia Arias, él mismo se hacía otras preguntas de cómo apoyar en las urnas el próximo día 23 de julio, a unos candidatos que habían prometido que tras los momentos de la pandemia que “saldríamos mejores”, mentira, una gran mentira, la peor, que junto con otros despropósitos han puesto de manifiesto la debilidad en la que ha quedado España respecto al “procés” con los indultos y rebajas en las penas de la sedición y la rebelión, que ha permitido que sigan realizando su rol separatista dentro y fuera del territorio nacional, y el gobierno de la Nación entre tanto mirando al cielo de luz y color para no enfadarlos, alejándonos mediáticamente de este problema, que sí no se remedia el próximo domingo, volverán al contraataque independentista en Cataluña y, por inercia, el País Vasco, sino se les da más prebendas y concesiones.
Pero, cómo poder votar a los mismos que han estado en el gobierno de la Nación con obcecación comunista, que han vapuleado cuando han querido al Presidente y han arremetido contra el Jefe del Estado, El Rey, y que tras cuatro años largos y cansinos de mentiras compulsivas no se han resuelto problemas que influyen negativamente en la recuperación del Estado del bienestar social.
El problema catalán, la pandemia que sigue estando ahí presente, el paro en índices inverisímiles, cada día la España vacía está más vacía ante la falta de atención sanitaria, educativa, etcétera; el desempleo entre los jóvenes que está superando cualquier análisis económico sensato, lo que unido a la falta de acceso a la vivienda, la ocupación ilegal de las mismas y declive exterior de España, junto con otras lacras de carácter fiscal y corrupción, entre otras muchas cuestiones, que solo podrán superarse desde la sensatez y ponderación, con la verdad política e institucional, y el respeto a la separación de poderes.
Pero sobre todo, en conclusión a la lectura del libro durante este fin de semana de intenso calor y con la siempre bienaventurada Virgen del Carmen, cuya onomástica litúrgica se celebró este domingo día 16 de julio, se hace necesario encontrarnos en plenitud para acudir el día 23 de julio a las urnas y con la razón, el alma y el corazón, depositar sendos votos que nos permitan un Gobierno que gobierne para todos los españoles, que no actúe como la yenka, que no mienta a la ciudadanía y que dé explicaciones, desde la verdad de toda decisión política adoptada, a las Cortes Generales, permitiendo a toda la sociedad civil seguir avanzando juntos en el marco constitucional de convivencia y bienestar.
Rafael Leopoldo Aguilera Martínez