Fiscalía precisa que la menor liberada fue contratada como asistenta y no ejercía la prostitución
La Fiscalía Provincial de Almería ha señalado este jueves que la menor de 13 años rescatada por la Policía Nacional “nunca tuvo relaciones sexuales por precio” ni por otro tipo de compensación, de forma que acudía a la casa del principal detenido a ejercer labores de “servicio doméstico” con el fin de obtener dinero para adquirir alimentos para su familia así como alcohol y tabaco para su madre, quien “no facilitaba la prostitución”.
Fuentes del Ministerio Público han indicado que la menor “se resistía a los abusos” que presuntamente cometía J.M.S.P., el hombre de 59 años para quien el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería decretó el ingreso en prisión por un delito de abusos a menores.
El hombre, que la conoció en el Paseo Marítimo de la capital, ofreció a la pequeña trabajar en su casa realizando labores de asistenta a cambio de una contraprestación económica o alimentos, a lo que la niña, dada su precaria situación familiar, accedió, según la investigación. En este sentido, el detenido habría tratado de aprovechar esta situación para realizar “tocamientos” a la menor, si bien esta rehuía tal situación y llegaba a encerrarse en distintas dependencias del piso para evitar los abusos.
No obstante, las mismas fuentes han asegurado que la niña nunca ofreció servicios de índole sexual, de forma que su madre, con serios problemas de alcoholismo, tampoco habría facilitado contactos relativos a la prostitución, aunque sí exigía a la niña que llevara a casa comida, cerveza y tabaco, de modo que si no lo hacía, era insultada o agredida.
Cabe recordar que tras la investigación policial, calificada de “espléndida” por parte de la Fiscalía, se produjo la detención del hombre cuando abandonaba un supermercado en compañía de la niña, a la que en ocasiones pagaba en especias, y en otras ocasiones con cantidades de entre 15 y 20 euros. En esa línea, han advertido el “alto riesgo” de que la menor hubiera llegado a caer en la prostitución.
Durante el registro de la vivienda del detenido se encontraron algunas fotografías de la menor que no tendrían un carácter sexual explícito, aunque sí sugerente para el arrestado. Tanto la niña como su hermano menor de 9 años, actualmente bajo el amparo de la Junta de Andalucía, estaban expuestos a un “abandono total” por parte de su progenitora, quien se encuentra en libertad con cargos por un delito de abandono de menores y otro de maltrato en el ámbito familiar.
SIN RESIDENCIA PARA SU ESCOLARIZACIÓN
Según la información aportada por la Fiscalía, la niña se encontraba sin escolarizar este año, si bien había asistido a clase con anterioridad en otra provincia en la que había residido con su familia y su rendimiento escolar era “excelente”. “Hasta el curso pasado tenía un buen rendimiento e incluso iba a buenos colegios”, ha explicado desde el Ministerio Público.
Tanto la niña como su hermano y su madre vivían como ‘ocupas’ en un piso de la capital almeriense, al que llegaron hace meses después de haber residido temporalmente en El Ejido, donde tampoco fue a clase. Esta circunstancia, junto al abandono de la madre, habría impedido su escolarización, ya que ni ella ni su hermano se encontraban empadronados aunque ella habría tratado de escolarizarse en un instituto de Almería.
La investigación, iniciada el 17 de enero tras la información facilitada por un confidente, permitió a los agentes actuar en poco tiempo y limitar la exposición de la niña a presuntos abusos así como a más trabajos, ya que también había sido empleada al menos durante 15 días en una pastelería de Almería.
En este sentido, cabe recordar que con posterioridad a los hechos, se detuvo a un hostelero de 32 años, que ha quedado en libertad con cargos por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores, al haber contratado supuestamente a la menor por cinco euros al día, aunque en ocasiones le pagaba “entre tres y dos euros”, según la Fiscalía.
BAJO LA PROTECCIÓN DE LA JUNTA
Los hermanos se encuentran en un centro de protección de menores bajo el amparo del Gobierno andaluz, que se ha hecho con su protección tras haber activado el sistema previsto para estos casos en coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la autoridad judicial. La policía ha pedido al juez la retirada de la patria potestad a la madre.
Fuentes del caso han añadido que los menores carecen de familia próxima que pueda hacerse de su cargo, ya que el padre de la niña, de origen ruso, habría muerto durante una guerra, mientras que el padre del niño de nueve años, de nacionalidad española, no se habría ocupado de su custodia.
La operación fue desarrollada por agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Almería y agentes de la Brigada Central de Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras.
AMPLIACIÓN NOTICIA.-
Juez mantiene la investigación de presunto delito de prostitución a la madre de la menor de 13 años
El titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Almería, Rafael Soriano, mantiene la investigación sobre la madre de la menor de 13 años rescatada por la Policía Nacional ante los presuntos delitos de abandono y relativo a la prostitución a partir de los indicios que figuran en el atestado policial.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes del TSJA, quienes han señalado que en el transcurso de la investigación judicial, aún en fase inicial, las imputaciones podrían variar, si bien de momento mantiene la investigación por estos delitos tras haber levantado el secreto de sumario.
Cabe recordar que la mujer se encuentra en libertad con cargos por estos hechos y cuenta con una orden de alejamiento tanto de la niña como de su otro hijo menor, de nueve años. Asimismo, en la causa también se encuentra investigado un varón de 59 años por la comisión de un presunto delito de abusos sexuales para quien el juez ordenó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
La investigación policial apuntaba a que la madre, con una fuerte adicción al alcohol, habría ofrecido a su hija como reclamo sexual a cambio de dinero, comida, alcohol o tabaco. No obstante, fuentes de la Fiscalía Provincial han señalado que la menor “nunca tuvo relaciones sexuales por precio” ni por otro tipo de compensación, de forma que acudía a la casa del principal detenido a ejercer labores de “servicio doméstico” con el fin de obtener dinero para adquirir alimentos para su familia así como alcohol y tabaco para su madre, quien “no facilitaba la prostitución”, según el Ministerio Público.
El principal detenido por estos hechos conoció a la chica en el Paseo Marítimo de la capital. Desde allí, la habría conducido a su casa y la habría sometido a “tocamientos” a la menor, si bien la menor rehuía tal situación y llegaba a encerrarse en distintas dependencias del piso para evitar los abusos.
Por su parte, la madre de la niña le exigía que llevara a casa comida, cerveza y tabaco, de modo que si no lo hacía, era “insultada o agredida”. Durante la investigación policial, calificada de “espléndida” por parte de la Fiscalía, se produjo la detención del hombre cuando abandonaba un supermercado en compañía de la niña.
Los hermanos se encuentran en un centro de protección de menores bajo el amparo del Gobierno andaluz, que se ha hecho con su protección tras haber activado el sistema previsto para estos casos en coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la autoridad judicial. La policía ha pedido al juez la retirada de la patria potestad a la madre.
Maeztu abre una queja para analizar cómo se ha llegado a la situación de desamparo de la menor rescatada
La Oficina del Defensor del Menor de Andalucía, dirigida por Jesús Maeztu, ha abierto una queja de oficio dirigida al Ente Público de Protección de Menores tras detectar la situación de desamparo de la niña de 13 años rescatada por la Policía Nacional y su hermano, asumiendo su tutela tal como dispone la legislación.
A este respecto, según el texto de la queja consultado por Europa Press, la Defensoría señala que “pretende obtener información sobre intervenciones de los servicios sociales con esa familia, así como respecto de la garantía de su escolarización obligatoria”.
De este modo, apunta que los medios de comunicación vienen relatando noticias referentes a una intervención policial realizada el pasado 8 de febrero de 2017, en Almería capital, a resultas de la cual se procedió a la detención y puesta a disposición judicial de determinadas personas acusadas de maltrato sexual y explotación laboral a una niña de 13 años de edad.
Según las crónicas periodísticas, añade Maeztu, “la menor ejercía la prostitución para mantener a su madre y hermano de 9 años de edad”, una situación “de la que se aprovechaban individuos desaprensivos que abusaban sexualmente de la menor, e incluso algún comerciante que empleó a la menor en su establecimiento explotándola laboralmente”.
Esta información, matiza, “ha sido posteriormente puntualizada por la Fiscalía que recalca que la investigación hasta el momento realizada no arroja datos concluyentes sobre el ejercicio de la prostitución, ello sin perjuicio de que a pesar de ello se hubiera producido maltrato sexual e incluso explotación laboral”.
Además, el Defensor apunta que ha trascendido que la madre de la menor es inmigrante procedente de Rusia y que el padre de la niña habría fallecido. Sin embargo, añade, “el padre de su hermano es de nacionalidad española, y al parecer nunca se habría hecho cargo de él”.
“Dejando a un lado estos hechos, cuya investigación y exigencia de las correspondientes responsabilidades está en estos momentos siendo objeto de trámite por los Juzgados de Almería, hemos de centrarnos en la circunstancia de que, en apariencia, ni la madre ni los menores estaban siendo objeto de seguimiento por parte de los servicios sociales comunitarios, ni por parte del Ente Público de Protección de Menores”, manifiesta el Defensor del Menor, que por ello inicia este expediente de queja.