Rubalcaba el camaleón de la extrema izquierda

La izquierda en España, aparte de ser incapaz de presentar un plan alternativo creíble y realizable para reactivar a España, parece que está cifrando sus esperanzas de batir al PP en dos tipos de actuaciones
Por un lado, fomentar la inseguridad en las calles, utilizar los métodos más denigrantes para minar la moral del partido vencedor en las pasadas elecciones del 20N, organizando manifestaciones y agresiones ante las distintas sedes de los populares y atribuyéndose una representación popular, que están muy lejos de tener si nos fiamos en el gran fiasco sufrido por el PSOE en las tres últimas elecciones que han tenido lugar en nuestro país, y, por la otra utilizar toda una serie de latiguillos made in el señor Pérez Rubalcaba, en los que insisten con machacona tenacidad, con el objeto de crear una falsa imagen de las medidas que está implantando el nuevo gobierno y, de paso, intentan que los ciudadanos se olviden de que la verdad está en la herencia nos dejaron los del gobierno del señor Rodríguez Zapatero, al que pertenecieron la gran mayoría de los que se rasgan las vestiduras ante las reformas del Partido Popular que, evidentemente, son mucho más serias, más estudiadas, más realistas y mucho más sensatas, aunque puedan ser duras, que aquellos conatos de reforma, absolutamente ineficaces, que pusieron en marcha, a la fuerza, a partir de mayo y de agosto del año 2011, cumpliendo “órdenes” de Bruselas..
Aquellos que tenemos interés en la zoología y nos gusta conocer la vida de estas bestezuelas que comparten la vida con los humanos, hemos tenido ocasión de conocer un pequeño reptil, un camaleón, que es conocido por su capacidad de cambiar de color cuando se siente amenazado y en respuesta a cambios de temperatura, luz, color y otras alteraciones ambientales. Este cambio es debido a la acción de hormonas que afectan a unas células pigmentarias especiales presentes en su piel. Este animal dispone de una lengua larga y pegajosa que proyecta hacia el exterior para cazar insectos. Bien, señores, pues si quisiéramos encontrar, en la naturaleza, un ejemplo más adecuado para compararlo metafóricamente con el actual Secretario del PSOE, deberíamos convenir que, salvo en tamaño, el pequeño reptil policromo nos permite hacerlo con bastante precisión. En efecto, la facilidad de cambiarse de “camisa” según le convenga a sus objetivos de Rasputín del PSOE, es conocida de todos. Primero se presentó como el salvador de España, eso sí, sin tocar ni una coma de las leyes laborales ni disminuir ni un euro de los salarios de los españoles; lo que no supo explicar a los ciudadanos era cómo se proponía hacerlo ni con qué medios contaba para ello, cuando apenas hacía unos meses que habían dejado al país endeudado y con un déficit de más del 8%.
Ahora, con el color rojo de comunista estaliniano, se apunta a las algaradas callejeras, a los complots en contra del legítimo Gobierno y a vender que, lo que trama el señor Rajoy, es que los trabajadores vayan a la ruina. Se olvida de que los responsables de que tengamos cinco millones y medio de parados no son los del PP, sino ellos mismos, el PSOE, sus autonomías y sus “barones” que, en los años en los que gobernaron, llevaron a la ruina a todo el país, dejando de pagar a sus proveedores y creando el enfrentamiento entre los españoles con su famosa ley del Aborto y La Memoria Histórica, que debería definirse como el mayor fraude histórico perpetrado en contra de la verdad. El sistema que utiliza don Alfredo utilizando, como el camaleón, “su larga y pegajosa lengua” para intentar desacreditar la difícil labor que el gobierno del PP está llevando a cabo, consiste en limitarse a decir que Rajoy “es un comentarista apesadumbrado” que a diario repite “lo mal que va a ir todo y lo que nos espera”.
¡Curioso argumento, si tenemos en cuenta que lo mismo vienen repitiendo el FMI, el BC, el ECOFIN y todos los organismos europeos encargados de vigilar la economía de la zona euro y del resto de la UE! Por lo visto, esta opinión del líder del PSOE nada más la compartirá él y, seguramente, el otro augur de la extrema izquierda, el “documentadísimo” señor Cayo Lara que, por lo visto, tiene la fórmula magistral para sacarnos del lío en el que nos metieron las izquierdas; lo que ocurre es que, se lo tiene tan callado que nadie ha logrado averiguar en qué consiste Otro pequeño acertijo a cargo del señor Rubalcaba. Dice que, todas las decisiones que toma Rajoy son “políticas” ¡Algo extraordinario en un político ¿no?! Y, como no, vuelven a la cantinela que viene repitiendo la izquierda, cuando apenas se acaba de poner sobre la mesa la nueva reforma laboral, haciendo pronósticos basados, exclusivamente, en sus previsiones sobre el futuro aumento de los despidos; sin tener en cuenta que ellos fueron los primeros que lo facilitaron. No parecen entender que, los empresarios, lo que quieren es sacar a flote sus empresas y, para ello, necesitan a sus trabajadores y también el poder prescindir de algunos de ellos, si las ventas no van bien; para evitar el que llegue el momento en que deban despedir a toda la plantilla.
¿Un recorte ideológico? Debería explicarnos el sesudo líder socialista, en qué consiste esta modalidad de recorte, si no es que se refiera a un lavado de cerebro o algo semejante, en lo que, por cierto, ellos son verdaderos especialistas. En todo caso, vamos a ver, ¿si unos señores están en paro y se les ofrece un contrato por un tiempo de prueba, con el que pueden cobrar un salario?, aunque sea sin derecho a indemnización por despido, para que la empresa no se vea obligada, si no da resultado o no tiene suficiente trabajo, a tenerse que quedar con él; ¿es esto peor que estar en el desempleo, porque no haya nadie que quiera contratarlo?Según esta doctrina,: para evitar que los trabajadores pierdan derechos –¿ qué derecho, el permanecer en paro? –, sería mejor que siguieran estando cobrando el subsidio a costa de todos los españoles, antes que someterse a “tan humillante” remedio. ¡Señores lo que tenemos que oír!
Ahora sí, en lo que el señor Pérez Rubalcaba se ha mostrado indignado e intransigente ha sido en que se llamase “delincuentes a los estudiantes y a los socialistas porque los apoyamos”. ¡Pero si son unos angelitos estos chicarrones de más de 20 años que insultan, agreden y les tiran botellas a la policía! ¡Cómo vamos que quejarnos de que ocupen las calles, destrocen cristales, lancen bolas de metralla contra las sedes del PP y además, se quejen cuando se detiene a alguno de ellos! Según el jefe de la oposición en España existe un Estado de Derecho para las izquierdas y otro para las derechas que, por supuesto no es el legítimo. Así, cuando se produce una manifestación no autorizada y claramente politizada en contra de las autoridades, se ocupa la calle, se reclutan activistas y se aplaude a un chiquilicuatre de 24 años, que todavía estudia, que se erige en el mandamás, prometiendo “incendiar todas las calles de Valencia” lo que procede es que, el PSOE, se lo lleve al Parlamento y le apoye. ¡Curiosa forma de entender la legalidad, señor Rubalcaba!
Cuando el señor Rubalcaba, en el Parlamento, dijo, (cuando se les reprendió su apoyo a los manifestantes), “faltaría más que no pudieran salir a las calles”, ya dejó clara cual sería su estrategia durante toda la legislatura. Es posible que, en el pecado tengan la penitencia, si los españoles que, mayoritariamente, votaron al PP, se dan cuenta de que lo que pretende el PSOE es poner obstáculos a la labor de recuperar el pulso de la nación. Entonces puede que no quede ni rastro del PSOE. O así lo veo yo, señores.
-Miguel Massanet-