Rubalcaba y Chacón insisten en adjudicarse más respaldo en un PSOE sin claro favorito

La pugna y la guerra de cifras entre Alfredo Pérez Rubalcaba y Carme Chacón ha continuado a lo largo de este domingo. Una vez finalizados los congresos provinciales para elegir los 956 delegados -una veintena ya estaban elegidos con anterioridad al pertenecer a la Juventudes Socialistas- con derecho a voto en el Congreso Federal de Sevilla, el equipo de Rubalcaba estima que tiene una ventaja de entre 130 y 150 delegados.
Por su parte, los partidarios de Chacón aseguran que cuentan con una ventaja de 120 representantes.
Ambos candidatos a la Secretaría General del PSOE han hecho un llamamiento a la unidad en los actos que han protagonizado en Santiago de Compostela y en Granada, respectivamente.
Según la candidatura del ex ministro del Interior, Rubalcaba, ha aumentado su ventaja sobre Chacón y le saca entre 130 y 150 delegados, que le da la victoria en doce Comunidades Autónomas.
De acuerdo con estas estimaciones al concluir hoy el proceso de congresillos provinciales, la candidatura de Rubalcaba tiene el apoyo de entre 520 y 540 delegados del total de 956 que tendrán que elegir en el Congreso federal de Sevilla entre los dos aspirantes a liderar el partido los próximos años.
Unos resultados que, según el equipo de Rubalcaba, ha tenido en cuenta la posibilidad de que la totalidad de los 101 delegados que aporta la federación de Cataluña vayan a parar a Chacón, aunque los integrantes de la lista del PSC no tienen la consigna oficial de votarla.
De acuerdo con estos cálculos, el ex ministro obtendría el respaldo mayoritario en 12 comunidades autónomas: Andalucía, País Vasco, Castilla y León, Galicia, Castilla-La Mancha, Asturias, Aragón, Baleares, Murcia, Canarias, Extremadura y Cantabria.
Además, tendría también el apoyo de la mayoría de las Juventudes Socialistas y de los militantes en el exterior.
Rubalcaba, que mañana viajará a Zaragoza para seguir recabando la confianza de los socialistas, apuesta por un partido de mayorías, intergeneracional y con un discurso común en toda España para recuperar cuanto antes la “credibilidad” y la “confianza” de los ciudadanos.
Los apoyos de Chacón
Carme Chacón, por su parte, habría conseguido “vuelcos significativos” en Valencia, Murcia, Canarias y Galicia, así como consolidar su ventaja en las seis federaciones que aportan mayor número de delegados, Andalucía, Cataluña, Valencia, Madrid, Castilla-La Mancha y Galicia.
En este sentido, el equipo de Chacón asegura que afronta este tramo final previo al Congreso de Sevilla con “tranquilidad”.
Además, han reiterado su gratitud a toda la militancia socialista que ha participado en el proceso designación de delegados y que han otorgado una “mayoría de apoyos” para la ex ministra.
En su intervención de Granada, Chacón ha afirmado que le sorprende cómo algunos están viviendo el Congreso Federal: “Donde algunos ven lío, lo que hay en este partido se llama libertad, y donde algunos quieren ver división lo que hay en este partido se llama democracia”, ha dicho.
En un encuentro con militantes y simpatizantes en Granada, Chacón ha animado a la militancia a que no tenga “miedo” al congreso ni a “abrir puertas y ventanas” de un partido que “debe ser capaz de poner en pie una alternativa sólida cuanto antes”, porque lo único a lo que hay que temer es “al inmovilismo” y a no reaccionar.
La candidata a liderar el PSOE ha abogado por el cambio: “Un cambio responsable sí, un cambio solvente también, un cambio seguro, por supuesto, pero seguro un cambio porque la gente tiene ojos y tiene memoria”, ha manifestado durante su intervención.
Chacón ha apelado a la “rebeldía” como “fuerza movilizadora” para asumir los resultados del partido “con coraje, y no para flagelarnos, sino para reaccionar”.
Ha incidido en que no dirá “ni una sola mala palabra” de su oponente, Alfredo Pérez Rubalcaba, porque su trayectoria es “intachable” para el PSOE y para el país, por lo que si es elegida secretaria le pedirá que siga trabajando en la dirección federal.
La ex ministra de Defensa ha reiterado que no quiere ganar el congreso “a ningún compañero, sino al abatimiento y la resignación”, y ha asegurado: “En cuanto se acabe el congreso, unidad”.
Chacón ha comenzado su intervención agradeciendo la actitud “ejemplar de transición, fuerza y unidad en un momento difícil” demostrada en este debate interno por agrupaciones andaluzas como la de Granada, la segunda en Andalucía en número de delegados (33) por detrás de la de Sevilla.
Convencida de que “al minuto siguiente” del 38 Congreso el partido “será más fuerte, estará más unido y tendrá más prestigio social”, se ha referido a las primeras medidas adoptadas por el Gobierno del PP para asegurar que “han bastado quince días para que se les caiga la careta”.
Chacón, que ha defendido las dos legislaturas de José Luis Rodríguez Zapatero, ha abogado por “rearmar ideológicamente” al PSOE y ha animado a los militantes a sentirse “orgullosos” del proceso interno abierto en el partido: “Es mucho más fácil que alguien señale con el dedo a una persona. Eso ni crea ruidos ni crea dudas, pero somos demócratas”, ha indicado la aspirante a liderar el PSOE.
‘No es un Congreso entre Alfredo y Carmen’
Mientras Chacón estaba en Granada, su oponente hacía lo propio en Santiago de Compostela, donde el candidato se ha mostrado “satisfecho” tras los ‘congresillos’ provinciales por el debate abierto sobre los proyectos socialistas, ya que “éste no es un Congreso -Federal- entre Carmen y Alfredo”, sino “de militantes”, ha dicho.
Rubalcaba ha apelado a la “unidad” en el partido y a colaborar todos “en un proyecto común”.
Sobre los resultados de estos ‘congresillos’, Rubalcaba no ha hecho valoraciones, aunque, durante el acto de Santiago se ha manifestado “especialmente satisfecho” por que “miles de socialistas han estado este fin de semana debatiendo en libertad y democracia”.
“Alguno dará doble sentido a mis palabras, puede hacerlo si quiere”, ha apuntado, pero puntualizó que su satisfacción es porque ha habido debate sobre “un proyecto político” para presentar a la sociedad tras el congreso, y el PSOE ha dado una imagen que es “para sentirse orgullosos”.
En esta ciudad, donde estuvo Chacón el viernes, Rubalcaba ha reivindicado la unidad en el partido que considera que logró el ex presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
“La unidad que hace que cuando un compañero viene a trabajar contigo no le pidas ni el carné de identidad, ni la agrupación en la que milita, ni los trienios que tiene en el partido, sino únicamente ideas, trabajo y compromiso”, ha aseverado, entre el aplauso de los presentes en este acto en un hotel compostelano.
Además, ha advertido de que la unidad es algo más que la integración y “no se refiere a estar todos en todos los sitios”, sino que “todo el partido colabore en torno a un proyecto que es común porque lo hemos votado en un congreso”.
Junto con la unidad ha reclamado que el PSOE sea una “oposición de Gobierno” que aspire a cambiar el país, y que este cambio, cuyo inicio situó en Felipe González, no se reduzca sólo a una palabra porque significaría que el partido “está hablando solo de sí mismo”.
Así, una vez más ha reclamado a los delegados para el 38 Congreso Federal que se celebrará en Sevilla del 3 al 4 de febrero, que “no voten contra nadie”, sino que apuesten por lo mejor para el PSOE, que “tomen partido por el partido” para hacerlo más fuerte.
“Éste no es un congreso entre Carmen y Alfredo, sino entre militantes, sobre el tipo de partido que queremos”, ha reiterado.
Rubalcaba ha dicho que los militantes “no pueden ser meros figurantes” en el PSOE y que es necesario abrirlo a la sociedad y “volver a conectar” con ella.
También ha lanzado críticas a la política económica del Gobierno de Mariano Rajoy. A su juicio, el presidente no tuvo nunca un plan ante la crisis económica, sólo “desconcierto, ideas de bombero, y rectificaciones”, por lo que es necesario que el PSOE realice una “oposición útil” y ofrezca un programa alternativo.
En este sentido, ha reivindicado el programa que él presentó para su candidatura en las elecciones generales de noviembre, el que ahora cree que hay que defender para decirle al Gobierno que “su política contra la crisis va a llevar a más crisis” y que “hay que invertir y no solo seguir ajustando”, ha advertido.
Con respecto a la organización interna del partido, Rubalcaba ha recomendado “ceder soberanía partidaria” para conseguir un socialismo europeo más fortalecido y más armonizado, y también ha reclamado un proyecto “más municipalista y más democrático”.
Además, ha abogado por hacer un partido “de mayorías, de clases medias e intergeneracional” que tenga “un discurso común” para toda España en temas fundamentales porque considera necesario “recuperar la igualdad de los españoles respecto a los servicios públicos” y que no haya diferencias en función de cada comunidad.