Penitencial procesión infantil con los jóvenes del colegio de la Milagrosa

Este viernes, penúltimo viernes de Cuaresma, desde el colegio religioso de La Milagrosa, situado en la calle Alcalde Muñoz, la comunidad educativa de este centro vicenciano ha organizado una procesión de Semana Santa con la presencia e intervención de alumnos de diversas edades que han dado un recital excelente del sentir del ser cristiano y cofrade durante esta tiempo litúrgico piadoso previo a la llegada de la Semana Santa.
El cortejo procesional católico fue todo un cúmulo de los aspectos más significativos y singulares de una cofradía penitencial, desde el portar una cruz de guía, que indicaba el inicio de la procesión infantil, la la escena de portar con cojines de terciopelo color celeste con el escudo de la Hermandad del Cristo del Amor, los símbolos de la crucifixión de Cristo: los clavos, corona de espinas, tenaza. Otros participantes iban revestidos de personal de la policía local, protección civil, de autoridades, costaleros, mantillas de vestimenta negra con sus rosarios, monaguillos con el incienso y navetas, que precedían a un pequeño paso de un Crucificado, el Cristo de la Amistad, portado a hombros de los jóvenes, que llevaban como medalla una fotografía de la Virgen de la Milagrosa.
El cortejo comenzó a las 11:00 horas y fue seguido por los padres, familiares y amistades de los niños y niñas del ciclo infantil, y muchas otras personas que al tener conocimiento de este hecho tan peculiar de nuestras vivencias cofrades, se acercaron para acompañarlos durante su tránsito por la Calle Alcalde Muñoz y su visita al interior del templo de la iglesia parroquial de San Sebastián, visitando, primeramente, al Santísimo Sacramento en el Sagrario y, posteriormente, al indaliano Cristo del Amor que se encontraba expuesto al pie del presbiterio y a Nuestra Señora la Santísima Virgen del Primer Dolor, situada en su hornacina, y cuyas imágenes realizarán la Estación de Penitencia en la tarde noche del Martes Santo.
En el interior del templo, fueron recibidos por el cura párroco, Rvdo. Manuel Cuadrado Martín, quien les dirigió con especial cariño pastoral unas palabras evangélicas y conversó catequéticamente con los participantes en la procesión. El cortejo finalizaba con una talla de la devocional Virgen de la Milagrosa en un paso pequeñito, portado, igualmente, a hombros y con un ornato floral de preciosa y austera belleza, cerrando el cortejo un grupo de jóvenes tocando diversos instrumentos musicales que emulaban el sonido de marchas procesionales pasionistas.


Fuente y fotos: Rafael Leopolo Aguilera