El Almería busca la fórmula más venenosa para los contragolpes

Los rojiblancos regresan al trabajo para preparar los detalles de la cita en Mestalla. Kaiky estuvo al margen.
Una vez completada la jornada de recuperación del lunes y tras el descanso del martes, el Almería ha empezado el trabajo específico en relación al encuentro frente al Valencia CF del próximo lunes. Las transiciones ofensivas han acaparado buena parte de la sesión matinal llevada a cabo en el Anexo donde, Kaiky, ha sido la única ausencia.
Tal y como hemos mencionado Rubi ha insistido en diferentes tareas ofensivas y defensivas donde el objetivo era ensayar y trabajar los contragolpes, sin duda la úncia mácula durante el último partido ante el Atlético de Madrid. El cuerpo técnico rojiblanco ha decidido hacer casi una hora de entrenamiento centrándose en situaciones de superioridad en ataque, tres contra tres, con finalización a portería. En la parte final hubo un partido en campo reducido.
El equipo rojiblanco seguirá con su puesta a punto durante esta semana especialmente larga, donde cerrarán en Mestalla la penúltima jornada de la primera vuelta. Todos los entrenamientos ya serán a puerta cerrada. Curiosamente la Unión Deportiva Almería cerrará la próxima jornada e iniciará la siguiente, por lo que hay mucho trabajo por delante.
El Bilal Touré afirma en los medios oficiales del club que nunca jugó de delantero en sus inicios como futbolista y que lo mejor está por llegar.
La Unión Deportiva Almería quiere aprovechar el buen momento anímico que arrastra tras la reanudación de la competición donde, si bien es cierto que todavía no ha conseguido la victoria, ha estado en disposición de conseguirla. Así se desprende de las palabras de El Bilal Touré en los medios oficiales: “E nuestra cabeza solo está dar el máximo en el campo y sin mirar el nombre del equipo que esté delante; queremos conseguir la victoria en Valencia” ha pronunciado durante una entrevista en la que ha repasado distintos temas.
El fútbol es un lenguaje universal pero, en cada país, tiene un dialecto distinto. Matices. Y la liga española, por su elevado nivel competitivo, ha realizado siempre una especie de selección natural con los futbolistas que han sabido adaptarse a ello y los que no lo han logrado. El Bilal Touré ha demostrado estar en el primer grupo con cuatro goles y una asistencia en su estreno en nuestro país: “Yo no sabía cuánto tiempo tardaría en adaptarme pero lo que sí era es muy consciente de que no podía perder el tiempo y de que debía ponerme las pilas para que todo saliera de la mejor forma”, ha reconocido a los medios oficiales del Club durante una entrevista. “Mi familia está muy feliz por mí pero me dicen que lo mejor está todavía por llegar”.
El gol ante el Atlético de Madrid no solo fue fantástico desde el punto de vista plástico sino también desde el mediático: “Todos los goles son bonitos e importantes, da igual que sean con la cabeza o con los pies. Gracias al centro de Robertone pude marcarle al Atleti y eso es para siempre; es un gol que lógicamente contaré a mis hijos porque anotar ante este tipo de clubes siempre ha sido un sueño”, explicó el ariete rojiblanco. Precisamente a la hora de analizar el gol del empate durante el último partido ha argumentado lo siguiente: “Ahora a nivel defensivo es muy complicado hacer este tipo de goles con centros laterales y remate en el área; pero si surge, hay que aprovecharlo. Los delanteros ya no somos como los de antes y ahora tenemos que estar en movimiento constantemente para ayudar también a defender”.
En la entrevista se ha referido también a uno de los temas recurrentes desde la llegada de Luís Suárez al Almería: “Claro que podemos jugar juntos, y también con Sousa. Eso ya es una decisión que tiene que tomar el entrenador según considere oportuno pero por supuesto que somos compatibles en el campo”.
El Bilal ha relatado también cómo fueron sus inicios: “De pequeño no hacía otra cosa más que jugar al fútbol. Siempre, al fútbol, pero curiosamente nunca había sido delantero sino que jugaba en el centro del campo o de defensa, incluso de lateral he llegado a jugar partidos”, señala un futbolista feliz y orgulloso de sus raíces africanas. En este sentido ha dicho: “Antes de ser profesional mi vida era la misma que la de cualquier niño africano de familia humilde. Me siento muy privilegiado. He trabajado mucho para conseguirlo y he renunciado también a muchas cosas para llegar a esto.