EL CONFIDENCIAL.- La banca tendrá que poner 25.000 millones de beneficios para cubrirse del ‘ladrillo’
La reforma financiera ya está aquí. Y trae novedades importantes. Como se sabe costará, como estaba previsto, 50.000 millones de euros, de los que la mitad saldrán de los beneficios de la banca. Se articulará de la siguiente forma.
Para los activos problemáticos se establece una provisión específica con una dotación extraordinaria con cargo a resultados, por un importe de 25.000 millones de euros. Se prevé, además, la creación de un ‘colchón de capital’ del 20% sobre suelo y del 15% para promoción en curso, que irá con cargo a beneficios no distribuidos, ampliación de capital o conversión de híbridos (preferentes, bonos convertibles, deuda subordinada…). Este ‘colchón’ tendrá un importe estimado de unos 15.000 millones de euros.
Para el caso de los activos no problemáticos, ligados en todo caso a la promoción inmobiliaria, se establece una provisión genérica del 7%. Esto se hace en previsión de un posible deterioro de esos activos, toda vez que representan un riesgo más elevado que el resto de la cartera crediticia. Esta provisión se realizará contra resultados y su importe estimado estará en torno a los 10.000 millones de euros. La fecha límite para realizar las provisiones, tanto específicas como genéricas o de capital, será el 31 de diciembre de 2012.
Tras la reforma, las provisiones específicas más el ‘colchón de capital’ cubrirán el 80% de los activos problemáticos -hasta ahora era sólo del 31%, en el caso del suelo-. Asimismo, la provisión ascenderá al 65% en el caso de las promociones en curso (antes era del 27%), y el 35% en promoción terminada y vivienda -anteriormente era de sólo el 25%-.
La suma total del saneamiento considerando tanto las provisiones como el ‘colchón de capital’, sumará unos 50.000 millones de euros, cantidad que se exigirá de una sola vez.
La nueva reforma financiera acelerará el proceso de fusiones en el sector y establece que las entidades que se fusionen deberán presentar un plan de viabilidad y medidas de gobierno corporativo. Y en ese sentido se obligará a que las entidades en proceso de fusión asuman compromisos de ampliación en la concesión de crédito. Las entidades deberán concretar esos proyectos de fusión antes del 30 de mayo y las solicitudes se resolverán en el plazo de un mes.
En el caso de fusiones, los saneamaientos exigidos se podrán realizar durante dos ejercicios, acudiendo para ello a la financiación del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
La dotación patrimonial del FROB aumentará hasta 15.000 millones de euros para mejorar su capacidad de endeudamiento.