EL CONFIDENCIAL.- La CNMV propone duras sanciones contra Jaime Botín por ocultar información de Bankinter
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha expedientado a Jaime Botín, primer accionista de Bankinter, por cometer una falta calificada como de “muy grave” por el organismo regulador. Tras meses de estudio, la CNMV ha elevado el expediente al Ministerio de Economía proponiendo que lo inhabilite y le imponga una sanción económica. Así lo aseguran fuentes financieras conocedoras de este expediente, que se abrió a mediados de 2010 cuando la Audiencia Nacional comenzó a investigar a la familia Botín por presunto delito fiscal. Fruto de aquellas diligencias, Jaime Botín declaró que tenía un 7,85% adicional de Bankinter, del que oficialmente solo controlaba el 16%.
Aquel 30 de julio de 2010, Cartival, la sociedad instrumental a través de la cual posee esa participación, explicó que el aumento de su paquete de acciones se debía a la disolución de una fundación familiar. Tal decisión societaria solo se pudo conocer una vez que la Agencia Tributaria hubo requerido a la familia Botín que regularizase sus cuentas ocultas en Suiza. Jaime Botín respondió presentando varias declaraciones complementarias el 4 de agosto de 2010 en las que se imputaba esa participación adicional en Bankinter y pagaba el IRPF correspondiente a los dividendos percibidos, así como el Impuesto del Patrimonio devengado por ese paquete de acciones entre 2005 y 2007. Entretanto, su hermano y presidente del Banco Santander, Emilio Botín, abonaba unos 180 millones por tener fuera de España cerca de 2.000 millones a través del HSBC.
Sin embargo, aquel argumento no convenció a la CNMV, que abrió un expediente a Jaime Botín, según han confirmado fuentes próximas a la familia. Después de varios meses de pesquisas, el organismo que preside Julio Segura dictaminó que el hermano del presidente de Banco Santander había cometido una falta muy grave, que le acarreará una fuerte sanción económica, la cual no ha sido desvelada.
Además, la Comisión propone que se inhabilite a Jaime Botín para ocupar cargos de responsabilidad en cualquier sociedad cotizada. Esta última parte no le afectaría en la actualidad, ya que delegó la vicepresidencia de Bankinter en su hijo Alfonso Botín en representación de Cartival. Pero sí le impediría ser consejero en el futuro.
En manos de Luis de Guindos
En cualquier caso, la sanción tendrá que ser rubricada por el nuevo ministro de Economía, Luis de Guindos, pese a que el expediente de la CNMV ya estaba en manos del Ministerio cuando Elena Salgado aún era titular de la cartera. Según distintas fuentes, la vicepresidenta del PSOE no tomó ninguna decisión al respecto puesto que el dictamen de la Comisión coincidió en el tiempo con el indulto a Alfredo Sáenz, vicepresidente de Banco Santander.
Fuentes oficiales de la CNMV han rechazado comentar esta información al indicar que no desvelan investigaciones internas. Por su parte, Bankinter ha declinado hacer ningún comentario al señalar que se trata de un asunto meramente familiar, en el que la entidad es un sujeto indirecto.
Sin embargo, se trata de un aspecto relevante para el banco, ya que Cartival tiene funciones ejecutivas desde el pasado mes de octubre, cuando la institución nombró a Alfonso Botín-Sanz de Sautuola y Naveda vicepresidente con mando en plaza. De hecho, su designación supuso la salida de Jaime Echegoyen como consejero delegado y el nombramiento de María Dolores Dancausa, su persona de confianza en Línea Directa, como sustituta.
Además, la ocultación de la participación real tiene gran incidencia en el control de Bankinter, ya que la familia Botín mantiene una guerra soterrada con Crédit Agricole. El banco francés y Cartival vivieron entre 2004 y 2006 una batalla por convertirse en el primer accionista y, por tanto, conseguir la gestión del banco. La sociedad gala, que llegó a rozar el 25%, frenó sus planes después de que los Botín le impidieran su entrada al consejo.