0-2: ¡Por fin! La tan ansiada “Primera Victoria” El triunfo colectivo siempre anota goles

Ramazani y Marezi los goles del triunfo que han marcado historia, además, los rojiblancos dejaron por primera vez su portería a cero
La UD Almería consigue ganar al CF Talavera 0-2 y certifica la clasificación para la segunda ronda de la Copa del Rey tras un partido en el que se mostraron sólidos en defensa y efectivos en ataque. Ambos tantos llegaron en la primera mitad; el primero lo firmó Ramazani tras beneficiarse del fallo de un rival y con una definición notable mientras que el segundo gol fue de Marezi, tras una asistencia de Arribas.
El once inicial elegido por Gaizka Garitano, tal y como ya avisó en la previa del partido, fue una declaración de intenciones con tan solo la presencia en el mismo de un jugador del filial. Maximiano en portería con una defensa formada por Pozo, Kaiky, Edgar y Mendes; en el centro del campo Lopy, como pivote, y un poco más adelantados Melero y Arribas; en la zona de ataque debutaría Marezi como ‘9’ acompañado en las bandas por Ramazani y Arnau.
El equipo almeriense continuó con sus buenas propuestas, generando peligro y en cada jugada parecía que podía llegar otro tanto. Especialmente a partir del minuto treinta donde demostraron a través de jugadas vistosas que empezaban a crecer en confianza. Antes del segundo gol rojiblanco Marezi y Arnau pudieron ampliar la cuenta. Justo antes del descanso, el delantero del filial, anotaría el gol de la tranquilidad tras una asistencia de Sergio Arribas y una ejecución inapenable del ariete. Fue la jugada previa al tiempo de descanso.
La segunda parte comenzó con un guion de partido similar al comienzo del encuentro, con el Talavera buscando un tanto rápido pero con un Almería que transmitía seguridad. Esta vez no iba a ceder la ventaja en el marcador y, a pesar de los dos goles, continuaron trabajando con y sin balón y mostrando esa competitividad tan deseada. Fue especialmente llamativo las ayudas de los jugadores por fuera a los pasillos interiores y el esfuerzo colectivo de todo el equipo. La primera victoria de la temporada estaba encarrilada y no la iban a entregar. Hasta los cambios fueron ambiciosos para impedir que el equipo cerámico complicara la noche copera.
Había pasado demasiado tiempo sin ver las triangulaciones entre los jugadores y las sinergias que permitieron al Almería, por muchos momentos, sentirse cómoda. Marezi gozó de una ocasión para el tercer gol antes de dejar su lugar a Baptistao, que tuvo también la oportunidad de lograr más renta en el marcador con un disparo que se marchó elevado. La acción fue de seda entre Arnau y el pase de Melero.
La única acción peligrosa del CF Talavera llegó pasada la hora de encuentro; Kaiky resultó providencial ante el remate de su delantero y salvando un gol cantado. El último intento del equipo local fue un balón al palo tras falta directa sobre la frontal del área. Previamente César Montes fue expulsado tras ver una rigurosa segunda cartulina amarilla en la acción de la falta.
Los jugadores estaban muy mentalizados a competir y ganar. Fue muy importante conseguir esa mentalidad llevándola a la práctica en el campo y sobre todo jugando fuera, por eso se celebra doblemente esa ilusión y alegría bien merecida.
Nunca hay que perder la esperanza el entrenamiento diario y las lecciones psicológicas del entrenador hacia sus jugadores ha dado por fin un resultado positivo.
Hay que mantenerse firme y constante así en todos los siguientes partidos se podrá conseguir un triunfo colectivo repetitivo.